Mesa 4: Entornos seguros


RELATORÍA Mesa 4: Entornos seguros 
Elaboró, Andrea Menjura (relatora)

Integrantes 
Sede A: Marlene Bustos, María Teresa Jimenez, Beatriz Vesga, Adriana Rodríguez, Julio Rojas, María Cristina Perdomo
Sede B: Astrid Ceballos, Andrea Menjura, Rosmery Morales

A propósito del trabajo realizado el día del foro es necesario precisar algunos aspectos discutidos y que se quedaron por fuera del video, en primera instancia reconocer que el ejercicio de cartografía social permite realizar una aproximación interesante de contexto al igual que escuchar las voces de los actores escolares como los padres, los estudiantes y los maestros y así mismo llegar a proponer algunos caminos de solución. En general en los procesos de indagación se encontró que la mayoría de estudiantes encuentran seguros los espacios donde hay presencia de maestros o donde están los vigilantes, sienten como lugar seguro el aula de clase y las dependencias del colegio donde están los administrativos. El único riesgo que observan los estudiantes en las aulas de clase es la perdida de objetos tanto personales como escolares, se identifica como aspecto poco favorecedor la falta de valores, como la honestidad, que principalmente se deben reforzar en el hogar, se sugiere la realización de talleres en la dirección de grupo destacando la trascendencia de este valor en la vida.

UNA MIRADA DESDE, CON, Y PARA LA SEDE A 

Los estudiantes de la sede A se sienten inseguros a la hora de la salida, En los grados séptimo y octavo la maestra realizo una dinámica teatral encontrando que especialmente las niñas se sienten más agredidas por los tocamientos irrespetuosos que se generan con el tumulto, se propone al respecto flexibilizar el horario de salida 5 minutos antes a los grados quinto, sexto y séptimo para descongestionar un poco la salida y así disminuir estos roces. También se observa otra dificultad a la hora de la salida y la entrada y es la presencia de personas ajenas a la institución que intimidan a los estudiantes, se sugiere el acompañamiento de la policía tanto a la entrada como a la salida ya que ellos son la autoridad en la calle. Los niños que llegan tarde manifiestan que estar afuera mientras abren la puerta representa un riesgo para ellos por la presencia de sujetos extraños que los intimidan, pese a que los estudiantes incumplen con el acuerdo importante de la puntualidad es necesario indagar las causas por las cuales se llega tarde y generar unas dinámicas de toma de conciencia sobre los riesgos y peligros de este mal hábito, se sugiere que el coordinador haga acompañamiento en la puerta y que cada estudiante que llegue tarde haga un registro en portería en una planilla indicando su curso, su nombre y el motivo por el cual llega tarde. Los baños también representan un lugar poco seguro para los estudiantes pues se presenta consumo de marihuana, sienten temor al entrar solos. Los estudiantes manifiestan no querer entrar a los baños móviles pues son sujetos de encerramientos e incluso estando dentro algunos estudiantes voltean estos baños. Para los maestros algunas conductas de riesgo están asociadas al uso indiscriminado de balones durante los descansos que provocan alto riesgo de accidentalidad, se sugiere reemplazar los balones por otras actividades como juegos de mesa u otros que no impliquen tanta velocidad o contacto. También se han observados conflictos manejados inadecuadamente entre estudiantes ante los tumultos que se generan en la cafetería a la hora del descanso. Los estudiantes de la sede A manifiestan que cerca al colegio hay zonas denominadas “ollas” donde se expende drogas identificando como puntos álgidos el museo nacional, el parque de la independencia y la rueda del planetario. También dentro del colegio existen estudiantes que pertenecen a pandillas de Santa Fe y la Perseverancia o que sus padres o familiares ejercen el sicariato como alternativa de vida, lo que incide en que su comportamiento sea de intimidación ante el grupo utilizando este pretexto como figura de poder. Por otra parte los estudiantes de la sede A identifican el patio como lugar de encuentro, de recreación, pero también donde se suceden conflictos manejados inadecuadamente que en algunas ocasiones terminan afuera en la rueda del planetario, la salida o el parque nacional donde también se observa la presencia de arma blanca. 

UNA MIRADA DESDE, CON, Y PARA LA SEDE B 

La sede B tiene unas características diferentes pues es más pequeña lo que trae como ventaja que se pueda hacer un mejor acompañamiento a los estudiantes, pues el área reducida permite mayor visibilidad de las situaciones, no obstante tiene algunas desventajas y es el poco espacio de juego durante los descansos, pues no está permitido correr para evitar los choques y accidentes especialmente de estudiantes más grandes con los de grados inferiores, como alternativas se han negociado dos espacios para quienes gustan jugar futbol en los pasillos laterales con balones de tela o goma, sin embargo los balones suelen pasarse al edificio contiguo o quedar atrapados en el techo sugerimos una malla de lona (que no quite la luz y que no tenga altos costos) en estos espacios para evitar que esto ocurra y se optimice este lugar, pues la perdida de balones implica que se reemplace por un balón inadecuado que puede provocar accidentes. También se prestan lazos y un balón de baloncesto para hacer lanzamientos esto ha reducido un poco los conflictos durante los descansos, al igual que el uso pedagógico del origami como espacio de reflexión. En la sebe B nos preocupan las presuntas situaciones de actos abusivos en los baños de niños más grandes contra otros más pequeños, y también las practicas inadecuadas como juegos bruscos y desperdicio de agua en ellos, como medida preventiva se están cerrando los baños 15 minutos antes de finalizar la jornada y 15 minutos mientras sale la jornada mañana e ingresa la tarde pues se identificó que los casos se presentaban en este lapso de tiempo. En la sede B los niños y niñas manifiestan sentir miedo en el baño especialmente cuando se acaba al tarde y empieza a oscurecer pues asocian este hecho con la presencia de espíritus. Los maestros de la sede B identifican como poco segura la escalera pues algunos estudiantes usan el pasa mano como resbaladero lo que ha traído como consecuencia varios accidentes, pese a los llamamientos y advertencias sobre el uso de la escalera se siguen presentando casos de mal uso. Desde el proyecto de prevención de desastres se propuso ubicar un tapete antideslizante o áreas rugosas en algunas secciones del pasa manos para evitar esta práctica inadecuada. En la sede B los maestros identifican como lugar poco seguro la salida de estudiantes pues aunque los padres en su mayoría recogen a sus niños y niñas algunos de ellos se presentan en estado de embriaguez o bajo el efecto de sustancias alucinógenas llegando incluso a agredir físicamente a los maestros, el espacio en la calle 20 también es limitado por el tráfico de carros lo que genera tumulto y casos de intolerancia entre padres llegando hasta agresiones físicas y verbales. Como medida preventiva los maestros de cada curso se ubican en diferentes zonas para evitar las aglomeraciones en la puerta. Sin embargo desde el proyecto de prevención de desastres se ha solicitado la ubicación de señalización de transito indicando la existencia de la zona escolar y los reductores de velocidad. A manera de conclusión se propone que a esta jornada de reflexión y reconocimiento del colegio se le haga seguimiento a los hallazgos y a las propuestas estableciendo fechas y ojala un nuevo encuentro.